lunes, 31 de marzo de 2008

Una joya: Primer episodio del Chavo del ocho

Chilindrina con pelo largo. Don Ramón con camisa amarilla viviendo, donde luego vive Kiko. Extras, que pasan por la vecindad y el ropavejero. Todo esto y más en el primer episodio del Chavo del ocho.


miércoles, 26 de marzo de 2008

Amo a Caramel

Caramel es una chica británica, que se ha radicado en Panamá para cumplir su sueño de ser cantante. Tiene varias canciones sonando, y la verdad es que me encanta verla, tienen un feeling muy cool. Espero que repunte su carrera, porque la verdad lo merece. Mientras disfrútenla en sus videos.



1492/Mi diablo rojo (No es otro post religioso)

No tengo ningún mal rato en mente de la época en que viajaba en bus, más allá de ir guindado en la puerta, que se me haya roto el pantalón con un alambre salido de uno de los asientos (justo antes de una entrevista) o del día que me subí como a las doce y media de la noche en uno donde el conductor parecía tener cinco años menos que yo (que tendría 20) y llevaba como siete pavos que fumaban sustancias extrañas en la parte de atrás mientras alentaban al chofer a aumentar la velocidad (eso sí, hicimos el recorrido en un tercio del tiempo). Pero esos eran tiempos en que hacerlo costaba solo quince centavos, y las trivialidades por ese precio parecían un premio. Sin embargo, cuando se subió el precio a veinticinco centavos (4 dólares adicionales al mes para una persona que solo lo usa de ida y vuelta, y que es más del uno por ciento del salario mínimo), se hizo con el compromiso de que mejorarían, cosa que no se ha cumplido ni en los sueños de los dirigentes del transporte, pero que está costando lagrimas que ahora viven regadas en el asfalto.
El transporte público no es un negocio. Si no les resulta rentable, vendan sus cupos, vendan sus buses, dedíquense a vender gasolina (que ahora es más costosa que el oro) y dejen que alguien, que en verdad quiera, tomar las riendas de esto. Mis buenos modales me impiden decir lo que deseo para los transportistas, pero la intención es lo que cuenta. Sé que todos añoramos el día en que nos llegue un sistema digno de transporte público.


miércoles, 19 de marzo de 2008

Ken Lee

Me he pasado toda la semana cantando esta cancion, lo menos que debía es postearla. Viva Valentina Hasan. La chica lleva casi 12 millones de visitas a Youtube.



Si la quieres corear, aquí está la letra

No one ken to ken to sivmen
nor yon clees toju maliveh
When I gez aju zavateh na
nalechoo more
new yonooz tonigh molinigh
Yon sorra shooo
yes ee shooo, ooo
Ken leeeee
tulibu dibu douchoo
Ken leeeee
ken lee meju more
Ken leeeee
tulibu dibu douchoo
Ken leeeee
ken lee meju more

martes, 18 de marzo de 2008

1492/ Échenme agua bendita

Tengo serios problemas con la semana santa (en realidad creo que mis problemas son más con la iglesia, que se tambalea estos días, mientras el “devulfren” anda haciendo de las suyas por allí) y ahora que estoy en ella, no sé realmente si deba tomar en cuenta todo lo que no hacia cuando era un niño.
Ahora me avergüenzo, pero hubo momentos en que temía vivir el resto de la vida con rabo y orejas de chimpancé, colita de sirena o de cortar un árbol porque saldría sangre, pero ahora me da más miedo acercarme a cualquier culto religioso porque puedo salir con el cerebro lavado o un tatuaje con tres seises.
Hay poco que entiendo de esto, porque muchas veces en casa, nuestra idea era ir a la vigilia del “sábado de gloria”, solo para obtener nuestra ración de “agua bendita” para el resto del año.(Cosa que nos serviría para… ¿repeler vampiros?¿Ahuyentar la casa de tuliviejas?¿Calmar la sed?)
Si le digo esto a mi abuela dirá que me acuerde de lo que nos pasó a mi familia un día de viernes santo, (cuando mi papá, mi mamá y yo, casi nos ahogamos en un río) por tentar al diablo en una fecha sagrada y, encima, no hacerle caso de no salir. (Por cierto, casi nos morimos aquella vez)
He quedado totalmente desamparado de culto y eso me da cierta nostalgia. Lo peor es que no tengo un plan “B” para contrarrestarlo. ¿Me puedo volver religioso por unos días? Quiero ver cómo salen los chorros de sangre de un palo de mango que tenemos en el patio, mientras trepado en él me convierto en mono.



Semana Santa


Acuérdense que el diablo anda suelto.

Por ahora les dejo con mi decoración para la época


viernes, 14 de marzo de 2008

Mis primeros 50.000


Pensaba que iba a suceder el fin de semana, pero hoy mismo me acabo de sorprender. Llegué a las 50.000 visitas.
Gracias a todos y sigan por aquí.

martes, 11 de marzo de 2008

1492/ Me voy a quemar en el infierno (por este post)

El vaticano acaba de condenarme al infierno. Yo que creía que por no matar al tipo que se robó al amor de mi vida y dejar propina a los meseros groseros estaba en cielo, casi me voy de bruces con la sorpresa. A Benedicto 16 se le ocurrió la brillante idea de reorganizar la lista de pecados. Según esta reedición de “Los Mandamientos” transcritos por Moisés, en el año de 1260 a.c., la contaminación ambiental, las drogas, la manipulación genética, experimentos en las personas, amasar fortuna y las desigualdades sociales, que antes eran simples excusas o modas, pasaron a formar parte de los nuevos pecados condenados por la Iglesia Católica. Pobre Bill Gates. Pobre Dolly. Pobre Amy Winehouse. (Aunque creo que ellos no son católicos).Hace rato que vengo pensando en lo “mucho” que trabaja la iglesia. El año pasado me sorprendió (léase con ironía) cuando salió a vociferar que el limbo no existe (gran avance para la humanidad). Luego salieron a condenar como faltas graves a las leyes de tránsito y para rematar, terminando el año, volvieron a permitir las misas en Latín en todo el mundo (aquí caen los globos y las serpentinas).Yo no sé si en realidad ese es el trabajo de la iglesia, pero yo apostaría más alto y dejaría de estar perdiendo el tiempo en trivialidades. No veo que hacen nada por acabar con las guerras, tratar de unir las religiones o exigir los derechos de los menos favorecidos, y principalmente, por “limpiar la casa”, que no está tan bendita como nos hacen creer.


jueves, 6 de marzo de 2008

Cuidado con Fidel

La gente de Websense Security Labs, me acaba de hacer llegar una alerta sobre un correo que anda circulando por la web, con el asunto “Mala Noticia”, y que habla sobre la muerte de Fidel Castro, pero que en realidad contiene el vinculo hacia un link, que descarga un programa malicioso que se presenta como software legítimo y benigno de un sitio ubicado en Korea.
El correo electrónico involucra a Univision y Notimex, e invita a los lectores a conocer más sobre el suceso a través de una liga para ver un video e imágenes exclusivas del acontecimiento, como Hugo Chávez llorando junto al cajón.
Si ya te afectó o quieres conocer más de esto visita http://www.websense.com/securitylabs/alerts/alert.php?AlertID=843

Ya saben....cuidado con Fidel Castro.

martes, 4 de marzo de 2008

1492/ En el dos mil

A finales de los ochenta, cuando ya comenzaba a tomar conciencia de la vida, la gente hablaba mucho del dos mil, el año en que supuestamente todo seria revelado. Recuerdo, ahora con ternura, cómo en ese entonces yo creía que en ese año, por fin se revelerían los extraterrestres: llegarían con sus enormes naves, bajarían por sus interminables escaleras y nos hablarían con nosotros. En ese momento yo creía que en el dos mil los autos volarían, las calles rodarían como las escaleras eléctricas y nos teletransportaríamos. En ese momento todo iba a ser diferente.
A veces, también tenía miedo de que en el dos mil se acabara el mundo. ¡En el dos mil va a pasar! Realmente, en los noventa hubo muchas veces en que pensamos que sucedería, sobretodo con los dos eclipses de sol que ocurrieron en esa década. Aun está fresco en mi mente los reportajes con el fondo de “carmina burana” donde anunciaban que el eclipse traería el fin. Eso según Nostradamus.
Curiosamente, cuando estábamos por entrar al dos mil, ya todas esas ideas habían desaparecido de mi mente, estaba por cumplir diecisiete años, y había asumido una postura más realista de las cosas. Recuerdo como en nuestro brindis de año nuevo yo bromeaba burlándome de mis vecinos, que por el miedo del Y2K, tenían la casa abarrotada en cajas con botellas de agua y provisiones. (…)
Estas cosas vinieron a mi mente ayer mientras corría. A veces creemos que el mundo se nos acaba pronto, pero para mi el mundo dejó de acabarse en el dos mil.