Hace más de tres años que el día de San Valentín no ha tenido sentido para mi. Veo vitrinas llenas de corazones, peluches, flores… ¿debe mi corazoncito sentirse mal por no tener con quien celebrar el San Valentín? ¿Desde cuándo ser soltero y feliz se convirtió en un delito?
¿Quiero un abrazo? Lo tengo ¿Quiero un beso? Por miles ¿Quiero sexo? Pues, solo levanto el teléfono. ¿Qué hay de malo en querer estar solo un rato y no preocuparte porque todo el mundo te mire raro cuando vas al cine solo? (Lo disfruto). Sin embargo, soy uno contra el mundo. Las mayoría de los solteros y en especial las solteras, pasan su vida buscando el “match” de sus vidas, en la mayoría de los casos infructuosamente y mi pregunta es ¿Debemos hacerlo? ¿Debemos pasando la vida tratando de ver prospectos?
Mucha gente dice que si me quedo esperando, puede que al final me quede solo en la vida ¿y que con eso? Sí, es muy triste que los días se le acaben a uno en la soledad, pero ¿es mejor pasarlo con alguien que no termina de convencernos?
Si de verdad existe el amor, quiero enamorarme, pero de alguien que me haga sentir satisfecho de entregar mi amor. ¿Qué importa si ni siquiera nos hacen caso en nuestro perfil en citas.com? (¿o no Vero?) ¿Qué importa si lo más cerca que puedo estar de la chica de mis sueños es por una revista o una pantalla plasma?
No es que me esté convirtiendo en un “grinch” del amor, simplemente quiero disfrutar de estar soltero y estar feliz, así que por ahora “cupido debe morir”.