martes, 1 de abril de 2008

1492/ Me tocaron el duro

Panamá está más caliente que nunca. El sol que soportamos hoy, no es el mismo de hace unos días y pues, a veces por más que estemos desnudos, no hay formas de pelear con el calor. Yo había encontrado una forma económica, práctica y sencilla de pelear contra eso, sin embargo el fin de semana, me di cuenta cómo cada vez más la inflación me está alejando de las cosas que disfruto.
Sucede que cada vez que un domingo me atacaba el calor, mandaba a comprar duros (si, esa magnifica invención, no sé si panameña, que consistente en jugo congelado), que se vendía en bolsitas plásticas por la módica suma de diez centavos y me refrescaba hasta el alma. Con un dólar yo podía comprar diez duros, pero ahora resulta que hasta los duros aumentaron de precio y ya no cuestan diez, si no quince centavos. Para comprar diez duros necesito cincuenta centavos más.
Hace días vengo notando que las cosas están cambiando en Panamá. He visto cómo sólo en el último año los precios de todo, alimentos principalmente, han ido cambiando. Pero tal vez no me había percatado tanto de cómo han cambiado las cosas hasta este domingo. Con eso de los duros, tocamos fondo.
La leche aumentó veinticinco centavos, la soda quince, la galleta cinco, el batido en el parque veinticinco centavos también y ni hablar de la gasolina.¿A dónde vamos a llegar? Amaba los días cuando era niño y que con veinticinco centavos hacíamos una fiesta con dulce, boquitas y piñata, para siete personas. Esos días parece que ya no volverán.